Una tarde de octubre del 2006, una de las residentes de un conjunto de departamentos residenciales en el centro de Moscú encontró en el elevador de su edificio el cuerpo sin vida la periodista de investigación Anna Politkóvskaya, aparentemente asesinada de cuatro tiros a sangre fría mientras regresaba del trabajo. A cinco años de no tener idea de quién pudo ser el perpetrador de tal crimen, las autoridades rusas han capturaron a un sospechoso.
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| Anna Politkóvskaya (AP) |
Este martes, Rustam Makhmudov fue detenido en la casa de sus padres ubicada en el distrito de Achkoi-Martan en Chechenia. La información sobre el arresto de Makhmudov, contra el que fue emitida en su día una orden internacional de búsqueda y captura, fue dada a conocer por el portavoz del Comité de Instrucción de Rusia (SKR), Vladímir Markin. Por ahora sigue sin conocerse quién mandó al checheno a asesinar a la periodista rusa, pero Makhmudov ya ha sido trasladado a Moscú para ser interrogado.
Los dos hermanos de Rustam, Dzhabrail e Ibrahim, ya habían sido juzgados como cómplices del crimen, al igual que el ex policía Serguéi Jadzhikurbánov y el antiguo agente de los servicios secretos Pável Riáguzov. Sin embargo, un jurado popular los absolvió por falta de pruebas el 19 de febrero de 2009.
Politkóvskaya, nacida en Nueva York en 1958, era considerada la periodista más crítica con la política del entonces presidente ruso, Vladímir Putin; especialmente sobre temas relacionados con la política de mano dura de Putin en Chechenia y la participación diaria de los soldados rusos en el secuestro y violación de chechenes con el beneplácito de sus superiores, junto con otros aconteceres en el Cáucaso Norte ruso. Autora de varios libros, comenzó a trabajar como periodista en el diario Izvestia en 1982 y desde 1999 escribía para Nóvaya Gazeta, la publicación más crítica con el Kremlin.
En varias ocasiones, la periodista confesó haber recibido amenazas de muerte de los servicios secretos rusos, el Ejército y otras agencias de seguridad del Estado a las que había criticado con dureza en sus artículos. De acuerdo con el bisemanario Novaya Gazeta, en los meses previos a su muerte Politkovskaya preparaba un artículo sobre las torturas sistemáticas en Chechenia.
Durante el mandato de Vladimir Putin, quien llegó al poder a principios del año 2000, hasta el momento del asesinato de Politkovsnaya, se tenían 12 casos de asesinato de periodistas sin resolver.
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