miércoles, 15 de junio de 2011

Aclaración de asesinato de periodista se rompe con liberación de Hank Rhon

Con la liberación de Jorge Hank Rhon anunciada el día de ayer por un juez en el estado de Baja California, las esperanzas de esclarecer uno de los asesinatos de periodistas más antiguos casi se esfuma. La juez noveno de Distrito en el estado de Baja California con residencia en Tijuana, Blanca Evelia Parra Meza, decretó auto de libertad para Jorge Hank Rhon y 10 coacusados más por no existir suficientes elementos para encarcelarlo por el presunto delito de acopio o posesión de armas y asociación delictuosa.

El encarcelamiento de Hank Rhon abrió la posibilidad para que el presidente Felipe Calderón, el gobierno de Baja California y la Secretaría de Gobernación cumplieran los compromisos hechos a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) años atrás. Una resolución emitida por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) respecto al asesinato en 1988 de Héctor Félix Miranda, codirector de Zeta, semanario especializado en el crimen organizado, pedía al gobierno mexicano una investigación seria, completa, exhaustiva e imparcial sobre el caso. En el homicidio de Félix Miranda, existen indicios sobre la posible participación de Jorge Hank Rhon como responsable intelectual. Se cree que Félix Miranda fue asesinado por las denuncias publicadas en el semanario sobre corrupción, enriquecimiento ilícito, tráfico de drogas, tortura y asesinatos que involucraban a grupos y personas privadas, así como a oficiales gubernamentales locales y nacionales.

Un equipo de trabajo integrado por autoridades de la SIP, y por Jesús Blancornelas y Francisco Ortiz Franco, ambos del semanario Zeta y éste último editor en jefe del mismo, hicieron una revisión del expediente judicial del caso Félix Miranda en el 2004 con la esperanza de que las autoridades lo retomaran. Sin embargo, Ortiz Franco fue asesinado la mañana del 22 de junio del mismo año mientras abordaba el auto en el que viajaba con sus dos hijos pequeños, convirtiéndose su caso en uno de los ejemplos de impunidad más sobresalientes de la historia de la libertad de prensa en México. Con el asesinato de Ortiz Franco la investigación de la muerte de Félix Miranda se detuvo.

La SIP ha insistido en exigir justicia total por el caso y ha presionado a las autoridades durante unas 10 visitas de delegaciones internacionales a México, en las que se pidió la revisión de las pruebas que podrían vincular a Hank Rhon al asesinato de Félix Miranda. Por este crimen fueron sentenciados Antonio Vera Palestina y Victoriano Medina Moreno, jefe de escoltas y escolta de Hank Rhon.

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