El asesinato de este periodista ha causado un nuevo revuelo sobre la situación en la que se encuentra el gremio periodístico en México. A los pocos días de ocurridos los hechos, El Diario de Ciudad Juárez publicó en su editorial un texto titulado “¿Qué quieren de nosotros?” en el que se pedía a los grupos del crimen organizado especificar al diario que esperaban del mismo para evitar la matanza de más de sus periodistas (aquí el link al texto http://www.diario.com.mx/ notas.php?f=2010%2F09%2F18&id= 6b124801376ce134c7d6ce2c7fb8fe 2f ).
A esta “invitación”, el gobierno federal respondió con una rotunda queja y advirtiendo que “ningún actor de la sociedad mexicana debe negociar con el crimen organizado”. El día de ayer, Alejandro Poiré, secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional, agregó que de acuerdo con las investigaciones llevadas a cabo por la Procuraduría de Chihuahua, la agresión cometida contra el fotógrafo habría sido motivada por problemas personales y no de índole profesional.
Sea como sea, la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Chihuahua denunció la inacción de la PGR tras el asesinato del periodista ya que, de acuerdo con el visitador de la Comisión, Gustavo de la Rosa, la PGR tardó más de 48 horas en tomar el caso.A su vez, el Colegio de Periodistas del Estado de Chihuahua condenó el homicidio del fotógrafo y demandó a las autoridades esclarecer el caso. Por su parte, el Comité para la Protección de los Periodistas (CJP por su siglas en inglés) condenó también el ataque y anunció que una delegación de esa organización se reunirá el próximo 22 de septiembre con el Presidente Felipe Calderón para abordar el tema de la libertad de expresión en México.
En 2008, el Diario de Ciudad Juárez perdió a otro periodista, Armando Rodríguez Carreón, cuyo crimen continúa sin resolverse.
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